viernes, noviembre 30, 2007

tristeza antigua

Juegos de espejos y sombras
y reflejos
en los que desesperadamente me busco
para creer que existo

jueves, noviembre 29, 2007

La clase de yoga

Voy a desentrañar los misterios del universo. La caminata me hizo bien. Al cuerpo se le agasaja con sutilezas. El viento en la piel de los brazos. Los reflejos en la órbita de los ojos. La saliva en la boca. Una idea o enigma en la mente. El viento en los ojos y los reflejos en los brazos.

Atravieso la puerta y suenan unos cristales. Adentro todo sigue como si yo no hubiera entrado. Están cocinando. Subo corriendo las escalares, viendo mis pasos. Corro como en sueños. Abro la puerta y allí está ella. Sus ojos se me aproximan saltando. Nuestras caras se sonríen y luego se rozan. Un beso. Me recuesto en un lugar. Me quedo tranquilo. La torturadora está ahí.

Comienza la clase.

Al principio, la mente vuela con miradas, todo es tan absurdo. La idea es llegar a un trance. El reloj dice las 7 y veinte. Falta mucho. La voz de la torturadora es como miel. El cuerpo está libre y veloz. Los últimos pensamientos quieren ser trascendentales. Ya estamos en el trance. El reloj marca las 7 y cuarenta.

En la guerra de un ensoñador, hay un episodio en que se ve durmiendo. Todo eso sucede. La torturadora dice todo lo que siente. Creo que ella es libre. Han pasado algunas horas. La siento acercarse. Tengo los ojos cerrados. Sus manos tocan mi cara. O lo imagino.

Salgo a la calle pedaleando.

martes, noviembre 27, 2007

Razones para pensar que ya nada es real

Cuando la razón va entendiendo las cosas, es señal de que todo va mal. Y hoy todo lo que tengo que decir viene de la razón, por lo tanto no fue un buen día. El juego de los ensoñadores es inaccesible a los esquemas humanos, por lo tanto nuestros pensamientos deberían poder vagar, por las nubes, por azulejos y por conductos de aire transcontinentales. Nadie podrá nunca comprender lo que hace a un ensoñador ser tal, y desempeñar su particular arte.

Las cosas pasan de ser lo que alguna vez y se derrumban los sueños y los intereses, y las verdades inexpugnables también desaparecen y los ideales de conducta, desde los cuales planeábamos reducir a cenizas el mundo, también flaquean. La cosa es hoy no ya usar el mundo como desafío para levantar una lucha a muerte, sino más bien usarlo como receptáculo de toda la locura y la fantasía que puede albergar una mente. Eso. Incapaz de comprender la terrible estructura de esferas que están dentro de otras esferas en donde el cuerpo se aventura a muerte, la mente decide ser libre de vaciarse completa en una puerta, o en un diálogo inexistente. No hay problemas fundamentales que resolver, porque el más fundamental de todos, es irresoluble; no se puede ni siquiera pensarlo. Todo es tan absurdo que la mente debe adecuarse, adecuada como estuvo a buscar lazos confiables entre todo y todos algún día, deberá cambiar.

lunes, noviembre 26, 2007

Thi otjer Death

La muerte puede tener muchas formas, nosotros no sabemos cuáles porque estamos conectados con otra cosa, con la vida o con lo que puerilmente creemos que es la vida, conversar y actuar en defensa de nuestros intereses, de nuestras más remotas esperanzas. Una parte de nosotros piensa cada cierto tiempo en la muerte pero no sigue por ese carril siniestro, se detiene y vuelve cada tanto. Es un pensamiento casi imaginario, más imaginario que los otros y que dura un segundo, y que nos despoja por unos segundos del yo, para que podamos ver algo objetivo alguna vez en el transcurso del día. Somos eternos habitantes del yo y aparece una luciérnaga que nos muestra algo distinto, algo nuevo, algo que no se puede defender porque está ahí desde siempre, la transformación, la muerte, la que puede tener muchas formas.

La muerte pasa de ser una gran batalla definitiva contra un ser de crueldad incurable, para tomar una forma un poquito más sutil. Se transforma en un acto de desenmascarar el juego de la vida, encontrando a la persona que sueña con nosotros y con este mundo, y que duerme de costado en un rincón de la habitación. Encontrarse de pronto con este ser sereno, cuyo sueño es el responsable de tanta macana inservible, nos pondrá de inmediato en contacto con una esfera lunar, que será la muerte del yo anterior. ¿Volveremos al mundo de la carne? De hacerlo, ya no creeremos tan fácilmente en las demostraciones de fuerza que nos da continuamente la realidad. Creeremos que nada es real, en todo caso.

La muerte es elegible pero no evitable, el juego del guerrero consiste en tender hacia una muerte de su propia conveniencia, una muerte que ilumine su sendero por la vida o que le dé a todo un cariz irónico, de profundo goce.

La raíz del acto de eludir constantemente la idea de la muerte es simplemente volver a las cosas sobre las que tenemos un cierto control, como un programa de la tele o la conversación pura en lugar de ver el fin. Pero la verdad es que el control es un vínculo abstracto con cualquier cosa y podemos aplicarlo perfectamente sobre una vida gloriosa, de vida o muerte. Sólo que al parecer estamos más solos en esto.

jueves, noviembre 22, 2007

La teoría del ser imaginario

Esta teoría ha sido formulada en muchos tonos. Voy a tratar de hacerlo en un tono particular, que es mío.

La teoría del ser imaginario dice, por supuesto, que todo es imaginario. Pone una barrera entre lo que es nuestra mente, y lo que realmente sucede en el mundo. Es decir que lo que nosotros pensamos y soñamos no está ni por si acaso cerca de llegar al mundo.

Podemos hacer lo que queramos. Eso es lo bonito de esta teoría. Podemos, por ejemplo, decirle cualquier cosa a cualquier persona, porque eso no va a pasar a mayores, sino que se va a quedar en la esfera de lo que es puramente imaginario. Podemos pensar lo que queramos y nunca va a ser verdad más allá de cierto punto. Todos nuestros problemas son, también, imaginarios, y no es necesario pensar en ellos. Esto lo digo con total responsabilidad.

Al ser todo tan imaginario como que pasa a dar lo mismo. Como que se puede pensar en cualquier cosa, posible o no posible. Como que ciertas tareas imposibles dejan de estar vedadas al pensamiento. Y se puede empezar una nueva historia, obviamente imaginaria.

Entonces se pueden 2 cosas: vivir sin preocupaciones, y hacer lo que se quiera.

lunes, noviembre 19, 2007

(afecto abstracto)

Para usted, sita Iris:


En el cielo hay arbustos
y yo quiero a la Iris Bustos

viernes, noviembre 16, 2007

Dahlmann

Desde un rincón el viejo gaucho estático, en el que Dahlmann vio una cifra del Sur (del Sur que era suyo), le tiró una daga desnuda que vino a caer a sus pies. Era como si el Sur hubiera resuelto que Dahlmann aceptara el duelo. Dahlmann se inclinó a recoger la daga y sintió dos cosas. La primera, que ese acto casi instintivo lo comprometía a pelear. La segunda, que el arma, en su mano torpe, no serviría para defenderlo, sino para justificar que lo mataran. Alguna vez había jugado con un puñal, como todos los hombres, pero su esgrima no pasaba de una noción de que los golpes deben ir hacia arriba y con el filo para adentro. No hubieran permitido en el sanatorio que me pasaran estas cosas, pensó.

-Vamos saliendo- dijo el otro.

Salieron, y si en Dahlmann no había esperanza, tampoco había temor. Sintió, al atravesar el umbral, que morir en una pelea a cuchillo, a cielo abierto y acometiendo, hubiera sido una liberación para él, una felicidad y una fiesta, en la primera noche del sanatorio, cuando le clavaron la aguja. Sintió que si él, entonces, hubiera podido elegir o soñar su muerte, ésta es la muerte que hubiera elegido o soñado.

Dahlmann empuña con firmeza el cuchillo, que acaso no sabrá manejar, y sale a la llanura.

jueves, noviembre 15, 2007

No compassion

Solamente una lucha a muerte puede mantenerme despierto en este instante
Todo este cansancio y agotamiento
Agitamiento
Y síntomas del sueño
Nada ha terminado
Mientras pueda escribir
Va a ser porque
Aún está pendiente la batalla final
La muerte no es un asunto mental
Imaginarse dentro de un cajón
Sino más bien un asunto de lucha intestinal
De no dejarse ir
Todo esto es un juego mientras no se presente la hora
La poesía es tener algo que decir
Pero no se justifica
Y la poesía no justifica la vida
Sólo la muerte justifica que haya
Una vida

lunes, noviembre 12, 2007

Tira los dados

si lo vas a intentar
llega hasta el final
de otro modo ni siquiera comiences
esto puede significar perder parejas
esposas parientes trabajos
y tal vez la razón
llega hasta el final
no comer en 3 ó 4 días
congelarse en una banca de la plaza
puede significar la cárcel
el escarnio
la burla y la soledad
la soledad es el regalo
lo demás es sólo una prueba
de tu resistencia
de cuánto en realidad quieres hacerlo
y lo harás
a pesar del rechazo y de las peores contabilidades
y será mejor que cualquier cosa que puedas imaginar
si lo vas a intentar
llega hasta el final
no hay otro sentimiento como ése
estarás a solas con los dioses
y las noches se prenderán con fuego
hazlo hazlo hazlo hazlo
hasta el final hasta el final
irás por la vida con la sonrisa perfecta
es la única lucha que vale la pena

domingo, noviembre 11, 2007

No-

Time

miércoles, noviembre 07, 2007

Recapitula tu vida