miércoles, agosto 31, 2011

kafka

kafka siempre dejaba bien claras las diferencias entre las voces
una muchedumbre habitaba en él
el castillo, mil novecientos veintisiete
obertura cinematografica
ni el más leve resplandor revelaba el gran castillo
cómo se sabía que estaba allí?
la historia sigue como el caudal de un río
no hay grandes interferencias
no se sabe cuándo va a terminar
salvo que uno siempre puede mirar el número de la página
trampa al receptor
UN LIBRO QUE TERMINA EN LA MITAD
el resto de las páginas contienen un cadáver exquisito
sorpresa!
no lo vio nunca venir
algo parecido se puede hacer con una película
se vuelve del intermedio a un momento ulterior de la trama
como si el espectador hubiera regresado demasiado tarde del baño
pero no, la película es así
y el espectador tiene que estarse preguntando qué pasó
el resto de la cinta
quiere a tus personajes
preocúpate de que tengan un buen final
pero no des un rábano por el espectador
la mayoría de las veces es un pobre diablo
o una puta de aquellas si no