domingo, marzo 01, 2009

"estocolmo"

estaba pensando en no ir a la pega el viernes porque ya quedaba poca semana o yo mismo no tenía razón alguna para ir, no era algo necesario para mí. más encima habíamos hecho mi despedida de soltero -y se nos había ocurrido invitar "amigas", amigas-amigas, amigas verdaderas no stripers- en un departamento todo lujoso que yo parece o el mono o uno de los dos nos habíamos conseguido. Tenía los medios sillones, los medios furnitures y un sector balcón bastante decente, y estábamos todos los hombres a un lado y todas las mujeres como detrás de una cortina, bueno la cosa es que al cabo como de una o dos horas de carrete yo me ponía a mirar para el otro lado de la cortina y le decía a pato algo de la calaña de "hay caleta de minas", weviando obviamente (no vayan a pensar que lo decía en serio) y pato me decía "todas débiles", refiriéndose a que todas tenían sobrepeso y yo me fijé y era bastante así, a pesar que yo no era tan exigente como el pato a la hora de seleccionar mis minas. Me había fumado una colita que me donó chamorro como una brasa ardiente, y solté el humo de a poco mientras veía llegar al camello y a otros más, los saludaba y me empezaba a cagar de la risa y a decir "está super buena" y demases. Me acuerdo que después se mexclaron los ambientes y las minas andaban entre nosotros weviándonos y eran puras amiguitas bien pencas, no habíamos traído a ninguna de las más ricas, salvo una que de repente llegaba tocando la puerta y yo hablaba con ella por citófono (la vieja valeria, rica ella) y me preguntaba si era bueno ese edificio para arrendar departamento porque ella andaba buscando y yo le decía por supuesto, son súper buenos los departamentos y todo eso pero tú te expones a ya sabes qué, acá en todos los departamentos lo único que hay son prostitutas que reciben a sus clientes, y ella me preguntó si eso era verdad y yo le dije claro, hay una empresa de putas que tiene sus instalaciones en este edificio, que en el cien por cien de las habitaciones estaba pasando eso en ese momento y después parece que no le quería asegurar tanto esa afirmación porque sentí que ella se decepcionaba, y yo no puedo hacer sufrir a una mujer. En fin me acuerdo que después nos poníamos a weviar por los pasillos del edificio y nos subíamos y bajábamos del ascensor, arrancábamos del botones porque la weá era casi hotel, escondiéndonos, detrás de una planta alta y cosas así. Todo eso me rememoró otro carrete antiguo que había sido en la casa antigua de pato, en donde el pato vivía en la mierda vale decir era, cómo explicarlo, como una fila larga de puras piezas que estaban conectadas por una como galería y el pato se iba a su pieza que quedaba como más bien hacia la parte de al fondo de la galería a hablar con dos minas, mientras yo me quedaba sentado en una silla de mimbre que estaba a la entrada del condominio. la karina por mientras preparaba unas comiditas y se preocupaba porque ella no estaba con el pato, y yo miraba por la galería y veía al pato como arreglar sus cosas para irse mientras conversaba por la ventana con estas dos minas, las cuales le ponían plena atención a pesar de que el pato no hacía prácticamente nada, de hecho no conversaba y miraba para otro lado pero sabiendo que lo miraban. Después apareció donde la silla de mimbre como enfrascado en una discusión chistosa con las dos minas, así como ganándoles la conversa y les decía "es verdad, yo siempre he querido que me secuestren", y la verdad es que a mí también me gustaba esa idea, de ser secuestrado y todo el weveo.


"Temukeitor"
estaba en este sueño tan raro, en la ex-casa de diego, que sentía que todo mi ser estaba ahí y por lo tanto era real, no era que yo iba a poder salir de ahí alguna vez, salir de ese sueño era tan absurdo como pensar en salir del mundo cotidiano, como pensar en que uno iba a poder interrumpir de pronto la realidad del mundo cotidiano. Sin embargo salí por las razones que se explicarán a continuación, al estilo lista:
- el espíritu me sacó
- mis aptitudes eran todas insuficientes para hacerme interrumpir ese sueño ultra absorvente
- la verdadera sabiduría consiste en saber pedir ayuda al espíritu para enfrentar nuestros desafíos
- el espíritu se encarga de decidir cuándo salimos y adónde entramos
- el verdadero poder consiste en ver venir las decisiones del espíritu, y en apoyarlas con más que todo el ser de uno mismo
- lo que sucede con uno no tiene más importancia que la que nosotros le damos totalmente al propio
- cuando seamos capacez de abandonarnos en manos del espíritu superaremos toda duda, todo miedo, seremos felices, libres, etc. (según corresponda a la propia identidad)
- por el momento sólo podemos disfrutar de la maravilla que es toda cotizable para nuestros sentidos
- o disfrutar el viaje hacia la muerte