lunes, junio 15, 2015

el mundo

la vida y la muerte están aquí
más unidas que nunca
ese juego que teníamos que jugar
cuando estábamos vivos
el mundo es un chiste
mundo se llamaba el juego
había que ir pasando etapas
alvarito ponía en tela de juicio
algunas de las reglas
y yo lo secundaba
más por hacer algo que por cualquier cosa
para mantener la lengua ocupada
en articular sonidos clandestinos
y el sol
cómo se ponía el sol en esos mares
y el paisaje a través de la ventana del tren
yo no sabía si era puesta de sol
o si Roberto Bolaño
había ordenado un ataque nuclear
contra esas crueles provincias
tristes praderas
lo que fuera que estuviera ardiento allí