sábado, octubre 14, 2006

como soñar

caleta de años pensé que los otros podían tener la razón
qué la van a tener



Ahora digo en un blog las cosas que nunca pude decir, y escribo comentarios en otros blogs, diciendo las cosas que nunca me atreví a decir. Gracias a este blogcillo, me escucho. Sé que sé y supe. Aparezco por allí escribiendo risas, palabras de haliento (como si yo tuviera alguna certeza), ideas locas, copias de los manuales de brujo. Trato de tú a tú a algunas personas que no conozco físicamente, o que conozco a penas. ¿Cómo es posible? Sólo con una parte de mi ser que no tiene dificultades en pensar y hablar. Soy lo que sueño en este blog. Todas éstas son ideas vagas, esperanzas tal vez, pero a ratos me da por pensar que sí estoy haciendo algo, que todo no es una ilusión. Que las metas más estrafalarias llegan a ser sobrias si se airean convenientemente. Me da también por pensar que todos son así, que en cada cabeza vuela un mundo, al igual que en la mía. Que podemos hablar de mundo a mundo. Ya me cansé de detenerme a escuchar, de discutir, de todo, en cada uno de nosotros hay una puerta a lo desconocido. Nadie me quita de la cabeza eso. Así que nuestra interacción como seres humanos tiene que ser una carrera de naves espaciales. También termino siempre hablando de estas cosas, haciendo metáforas espaciales, y hablando del ser humano. Todo lo que yo quería era constatar mi capacidad de hacer comentarios verdaderos en los blogs de los otros. Pero la idea es como soñar.