durante años me envenené la mente
pero sabía que en cualquier momento podía liberarme
peligroso juego
finalmente ya era demasiado tarde
esa noche vi demasiada televisión
y luego no pude quedarme dormido
salí a recorrer las calles
estaba oscuro
tan oscuro como mi habitación
en la mente tenía la idea del mapa
que había mirado antes de salir
la siguiente calle debía de ser Dunquerque
La ciudad de Luxemburgo no es tan hospitalaria de noche
no veía nada más allá de la punta de mi nariz
no sé cómo llegué a una especie de porshe
con botones
a mis espaldas
sentía que debía de haber un espacio abierto
pura tincada
puesto que no se distinguía nada
recordé una vez más el mapa
aquella debía de ser esa plaza
y entonces ahí estaba el metro Opera
esa era la otra forma de llegar a la casa de mi tía
y yo pude haberla tomado
y haberme ahorrado una caminata por las tinieblas
saqué mi celular
traté de alumbrar la plaqueta de botones
pero no veía el nombre de mi tía
alguien llegó y abrió el portal con su llave
y cucarachas gigantescas
y aladas...
pero me estoy adelantando!
esa persona venía bien abrigada
correspondía porque hacía frío
me pidió muy amablemente que no entrara
que tras él esperara que se cerrara la puerta
le pregunté en francés
si sabía dónde vivía mi tía
yo no soy ningún ladrón ni acechador
acechador soy pero poco
el tipo me dejó entrar
me presentó a todos como el sobrino de mi tía
una cucaracha gigante y alada
apareció en el muro
pregunté si querían que yo la matase
me acerqué pero mi zapato
era un zapato de vieja
con taco
demasiado pequeño para dar cuenta de la bestia
la cucaracha era del porte
de un pan de hamburguesa
una señora la mató
y dejó el cadáver encima de la mesa
me percaté que allí había varias
cucarachas de ese estilo
muertas entre servilletas
tuve la oportunidad de tocar un poco el piano
y mejor no sigo contando porque no me están creyendo nada
pero sabía que en cualquier momento podía liberarme
peligroso juego
finalmente ya era demasiado tarde
esa noche vi demasiada televisión
y luego no pude quedarme dormido
salí a recorrer las calles
estaba oscuro
tan oscuro como mi habitación
en la mente tenía la idea del mapa
que había mirado antes de salir
la siguiente calle debía de ser Dunquerque
La ciudad de Luxemburgo no es tan hospitalaria de noche
no veía nada más allá de la punta de mi nariz
no sé cómo llegué a una especie de porshe
con botones
a mis espaldas
sentía que debía de haber un espacio abierto
pura tincada
puesto que no se distinguía nada
recordé una vez más el mapa
aquella debía de ser esa plaza
y entonces ahí estaba el metro Opera
esa era la otra forma de llegar a la casa de mi tía
y yo pude haberla tomado
y haberme ahorrado una caminata por las tinieblas
saqué mi celular
traté de alumbrar la plaqueta de botones
pero no veía el nombre de mi tía
alguien llegó y abrió el portal con su llave
y cucarachas gigantescas
y aladas...
pero me estoy adelantando!
esa persona venía bien abrigada
correspondía porque hacía frío
me pidió muy amablemente que no entrara
que tras él esperara que se cerrara la puerta
le pregunté en francés
si sabía dónde vivía mi tía
yo no soy ningún ladrón ni acechador
acechador soy pero poco
el tipo me dejó entrar
me presentó a todos como el sobrino de mi tía
una cucaracha gigante y alada
apareció en el muro
pregunté si querían que yo la matase
me acerqué pero mi zapato
era un zapato de vieja
con taco
demasiado pequeño para dar cuenta de la bestia
la cucaracha era del porte
de un pan de hamburguesa
una señora la mató
y dejó el cadáver encima de la mesa
me percaté que allí había varias
cucarachas de ese estilo
muertas entre servilletas
tuve la oportunidad de tocar un poco el piano
y mejor no sigo contando porque no me están creyendo nada